Martes, 2 de noviembre de 2021,

 

Este primero de noviembre, junto al arribo de dos carros compactadores cero kilómetros y la inauguración del mítico Festival de Teatro ‘Ethnic Roots’ –parte vital del acervo cultural de la compañía–, Trash Busters S.A. E.S.P., empresa de aseo de San Andrés, celebra 26 años de vida. Momento propicio para entrevistar a su gerente, Patricia Archbold Bowie (Foto Moisés Ariza).

 

Tras más de un año de inconvenientes producto de la pandemia, huracanes en 2020, y alteraciones de orden público en todo el país, ¿cómo evalúa este 2021?

 

La pandemia asociada al covid-19 nos marcó a todos en el planeta, pero considero que nos dejó muchas enseñanzas positivas, a pesar de todo… Para Trash Busters representó el no pago oportuno del servicio prestado en las vías de nuestra isla, en los sectores residencial, oficial y demás usuarios que por su naturaleza no podían hacer pausa en sus actividades.

 

Para completar el panorama nos golpearon los dos huracanes en el mes de noviembre, cuando estábamos tratando de equilibrarnos un poco; tuvimos que utilizar algunas reservas con que contábamos para contingencias (obviamente no de esas magnitudes), recurrir a créditos bancarios y hasta personales, con el fin de atender los compromisos que no daban espera, como son los de la nómina y parafiscales de los más de 90 empleados, contratistas y proveedores, entre otros.

 

El Paro Nacional, con sus consabidas alteraciones de orden público, también nos afectó grandemente, en cuanto al tema de la adquisición de los repuestos necesarios para realizar el mantenimiento predictivo y preventivo de los vehículos recolectores, así como para la reparación en general de los mismos; porque hubo desabastecimiento de estos insumos en todo el país.

 

¿Cuándo y cómo pudieron normalizar la situación?

 

Sólo hasta el segundo trimestre de este 2021, las cosas comenzaron a normalizarse y pudimos obtener todos los repuestos necesarios; además de encargar los cupos para la compra de dos carros compactadores nuevos, los cuales tuvieron un retraso significativo, consecuencia de lo dicho anteriormente.

 

Sin embargo, a pesar de tantas dificultades y talanqueras por doquier, mantuvimos el buen ánimo, la devoción en la prestación del servicio y la esperanza en que todo mejoraría. Y así ha sido… Un año de grandes retos, pero también de mucho aprendizaje y resultados positivos.

 

En 2020, ad portas de sus 25 años, usted nos comentaba que la empresa contaba con cinco carros compactadores cerrados. ¿Cómo está el parque automotor actual, sumando las nuevas adquisiciones?

 

Hoy día contamos con siete carros compactadores de residuos sólidos, incluyendo las dos nuevas unidades adquiridas en octubre de este año. Pero, adicionalmente, tenemos dos volquetas de caja abierta para atender la recolección de residuos especiales y no aprovechables para la Planta Incineradora de Residuos Sólidos Urbanos (RSU), primordialmente; estas últimas también apoyan la recolección en los sectores de difícil acceso para los carros compactadores.

 

Tenemos, igualmente, doce carros papeleros, para el barrido de vías carreteables; tres barredoras manuales, también para el barrido de vías; un motocarro, para la recolección puerta a puerta, cuando sea necesario; y una retroexcavadora.

 

¿Qué le respondería a la secretaria de Servicios Públicos, Paola Vélez, quien dijo que “se están presentando retrasos en la recolección, debido al mal estado o carencia suficiente de vehículos”?

 

En cuanto a lo manifestado por la funcionaria sobre nuestras volquetas de caja abierta, es cierto que se deben cubrir, lo cual hacemos al finalizar la recolección y se realiza el recorrido hacia el sitio de disposición final, para que se reduzca el contacto de los residuos con la lluvia, el viento y se evite el esparcimiento de los mismos, tal y como lo contempla el Decreto 2981 de 2013, en su artículo 37, numeral 10.

 

El nivel permitido lo da la misma volqueta, y también se utilizan estibas para aumentar su capacidad, lo cual es permitido, siempre y cuando no haya ‘regueros’ de desechos en las rutas. Siempre somos muy cuidadosos en cuanto al cumplimiento de las normas que nos rigen.

 

¿Y en cuanto a las demoras?

 

En torno a los retrasos en algunas de las rutas de recolección –no en todas, como lo manifestó la funcionaria–, debo decir que a finales de julio tuvimos algunas dificultades por cuenta de la demora en la llegada de los repuestos para nuestros carros recolectores, afectación ya comentada; pero no por carencia o insuficiencia de vehículos.

 

Reafirmo que la capacidad instalada es suficiente, aún antes de adquirir estas dos nuevas unidades, teniendo en cuenta el esquema operativo de Trash Busters S.A. E.S.P. Distinto es que se presenten problemas por nuestra condición de insularidad, lo cual no permite que nos lleguen los insumos a tiempo para las reparaciones necesarias; aunado a las demás circunstancias anotadas y que no son de desconocimiento de la comunidad, ni de los funcionarios del Gobierno Departamental.

 

Ante la situación presentada, acudimos al alquiler de volquetas particulares, como plan de contingencia, así como el trabajo 24 horas distribuido en tres turnos, para solventar dicha situación presentada durante tres días. No somos perfectos, tampoco estamos exentos de situaciones de fuerza mayor, que pueden presentarse en cualquier empresa.

 

¿Qué hay de los planes de contingencia que se vienen desarrollando hace algunas semanas por la acumulación de residuos en varios sectores de la isla?

 

Lo primero que debo decir es que la “acumulación de residuos de todo tipo», se debe primordialmente a los residuos denominados ‘especiales’, los cuales se encuentran arrumados en distintos puntos críticos de la isla, los cuales, una vez abandonados en las vías y por su composición, características y tamaño, no son responsabilidad de nuestra compañía, sino del ente gubernamental, como lo dispone la normatividad vigente y la del Gobierno (Secretaría de Servicios Públicos) que bien lo saben.

 

Estos residuos especiales deben ser dispuestos en el mencionado ‘Punto Verde’, el cual se encuentra cerrado desde hace varios meses y teniendo en cuenta que no pueden ser recibidos en el relleno sanitario de la isla. No obstante, Trash Busters, ha realizado jornadas de recolección de estos residuos, cuando se ha permitido esporádicamente su ingreso a ese sitio de acopio temporal, con miras a colaborar con la buena presentación de los distintos sectores afectados.

 

En cuanto a los planes de contingencia ante cualquier situación y en cualquier tiempo, tenemos dos carros compactadores como vehículos de stand by; alquiler de volquetas, si fuese necesario; y un stock de repuestos o insumos de mayor rotación para la reparación de las unidades, tanto compactadoras como de caja abierta.

 

Qué se oiga bien claro: cada una de las entidades tenemos nuestras responsabilidades y lo ideal es que las asumamos con el mayor compromiso e idoneidad. De igual manera, los usuarios del servicio que prestamos tienen también deberes que van de la mano de sus derechos.

 

¿Cuáles son esas obligaciones? ¿Las podemos recordar?

 

¡Claro que sí! El manejo adecuado de los residuos que generan en sus hogares o sitios de trabajo, cooperando de esta manera, junto con las instituciones gubernamentales y privadas, en la preservación de nuestra Reserva de Biosfera Seaflower y sus distintos ecosistemas, los cuales son muy frágiles y requieren de nuestro mayor cuidado.

 

Por último, lo que sí está muy claro para Trash Busters, es que el trabajo con mística, devoción y alto compromiso, es la única respuesta posible y viable ante cualquier situación que se presente, sin importar los vientos huracanados que atacan, creando halos de zozobra que tienden a desestabilizarnos… Pero no lo logran.

 

Porque también tenemos claro que las dificultades nos hacen más fuertes, eso sí: con la confianza puesta siempre en Dios Padre.

*Tomado del diario El Isleño Articulo Original

Related Entries